El síndrome del impostor se caracteriza por un elevado malestar emocional asociado a sentimientos y pensamientos de no merecer la posición que se ocupa a nivel laboral o académico y de subestimar o minimizar los logros o el éxito.
Los principales síntomas de este síndrome son:
- Falta de confianza en las competencias personales que se tienen respecto a ese puesto de trabajo o de estudios.
- Baja autoestima y pobre autoconcepto de sí mismo/a.
- Creencia de que en realidad no valen tanto como otros le valoran en ese puesto de trabajo o de estudios.
- Inseguridad en el ámbito académico, laboral, e incluso en las relaciones sociales en algunas ocasiones.
- Creencia de que sus logros se han dado por suerte o azar, de que estos no son merecidos o a que son gracias a otra persona (“mejor que ellos/as”).
- Miedo a que otros se den cuenta de que es un “fraude”.
- Creencia de que se dará un fracaso incluso en situaciones en las que previamente se han superado con éxito.
- Reducción de la motivación de logro debido a esta falta de confianza en sí mismo/a.
En muchas ocasiones personas con grandes conocimientos y competencias profesionales, se ven mermados y afectados por este síndrome y llegan incluso a no llegar nunca a desarrollar su profesión por asumir como verdaderas las creencias mencionadas anteriormente.
Hay muchos artistas, doctores, periodistas, profesores, entre otros profesionales; que no están trabajando en su campo laboral debido a este síndrome.
Si te suenan estos síntomas y crees que tú o alguien de tu alrededor sufre este síndrome, no dudes en ponerte en contacto con nosotros para que te ayudemos a superarlo en terapia.